Hoy como ayer, mañana como hoy. Otro domingo más y así vamos salvando este mes de marzo, el de los campos en flor, el de los pepes y pepas, el de la primavera anunciada, del olor a azahar, de los días más largos, de las noches veladas al sueño de un mañana efímero... seguimos haciendo camino, un camino más llevadero al peso del grupo que comparte la eternidad, un mismo sueño reinventado cada momento del peregrinar constante, parejo y armónico. Somos más los que queremos, los que podemos, los que amordazamos el tiempo cada semana, los que reivindicamos unas horas de gloria en el ocaso, los que dormimos cada noche el sueño de los héroes.
Nueve son los corredores que se han dado un homenaje de resistencia y abnegación. Con ausencias notables, que ya son menos notables en el tiempo, salimos en una mañana que invitaba a compartir el lujo de la marcha. Atrás quedan los días tristes de lluvia incesante, El Zaudín y río Pudio hasta Almensilla para volver por Palomares, Gelves y San Juan. Toda una etapa de 30 km, tres horas de expansión, de complicidad, de conveniencia en el hacer, aunque más uno optara por reivindicar ese impulso instintivo-obsesivo de ampararse en su debilidad no justificada, en la oportuna decisión de ser siempre uno mismo, más de lo mismo. Al final, todos volvemos al sitio con la esperanza de que siempre habrá una nueva oportunidad.
1 comentario:
No todo va a ser gozar de la primavera en el color y en los olores, tambien hay que verla en el camino, como nos enseñó el que todos sabemos.Tenemos que seguir haciendo el camino los corredores y marchadores de nuestro club, por eso no valen excusas de frio,lluvias y vientos.Igual que Manolo el cordobés, tambíen yo hago el mismo llamamiento para todos aquellos que se crean merecedores de ser llamados corredores,marchadores,ciclistas y andadores para que sigan el camino señalado.He dicho.
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